De Águilas a Asturias en vespa: IV Desafío Lagos de Covadonga 2014. 6ª Etapa: Ribadesella - Costa de Llanes

Con esta crónica queremos compartir nuestra experiencia con los amantes de los viajes en vespa. En esta ocasión hemos recorrido 2.953 kms (ida y vuelta), partiendo de Águilas ( Murcia) hasta Ribadesella (Asturias), atravesando Albacete, Ciudad Real, Ávila, Toledo, Salamanca, Zamora, León, Cantabria y Asturias donde durante tres días realizamos nuestra particular “Travespera” por los Picos de Europa. Llegamos a Ribadesella el jueves 3 de julio para participar los días 4 y 5 en el IV Desafío Subida a los Lagos de Covadonga que, un año más, organizó el Vespa Club de Asturias. El domingo 6 de julio iniciamos la vuelta a Águilas, que transcurrió por las provincias de Asturias, Palencia, Burgos, Soria, Cuenca, Albacete y Murcia.

 6ª Etapa: Ribadesella - Costa de Llanes 

 Después de tres jornadas de aventura por los Picos de Europa, y cumplido nuestro reto de recorrer la ruta Travespera, el 4 de julio por la mañana decidimos partir desde Ribadesella hacia la zona de Llanes. La escapadita resultó oportuna para conocer algunos de los rincones costeros más singulares y espectaculares del cantábrico asturiano. La primera visita la realizamos a Gulpiyuri. Qué grata sorpresa fue comprobar la belleza de esta diminuta playa oculta entre montañas. Un capricho del mar con categoría de Monumento Natural y una joya única de ineludible visita.

Camino de acceso a la playa

Panorámica de Gulpiyuri

La playa tiene unos 50 mts. de longitud

Aquí no cabe la sombrilla, ni la tortilla, ni la magra con tomate, ni falta que hace...

Vista de Gulpiyuri, nada más llegar

Justo al lado de Gulpiyuri está San Antolín y allí nos dirigimos tras vivir un momento mágico en la peculiar y encantadora playita de "Pin y Pon".

Contemplando la playa de San Antolín

Panorámica de poniente

San Antolín, otra belleza de la costa de Llanes

Panorámica de levante

Desembocadura del río Bedón en San Antolín 

 Si Gulpiyuri y San Antolín nos encantaron, qué decir de Torimbia. Sencillamente nos quedamos con la boca abierta. Jamás habíamos visto una playa tan linda. Su blanca arena y sus cristalinas aguas la convierten en un lugar de excepcional belleza paisajística, ejemplo de cariño y respeto por el medio ambiente.

Panorámica de la Playa de Torimbia

Instantánea de levante

Encantada de poder posar ante semejante maravilla

En esta foto se aprecia el sendero que conduce a la playa

Rincón de poniente

Torimbia, paradisiaca y expectacular

Una vez concluido el recorrido playero volvimos a Ribadesella para darnos un relajante baño en la piscina del Gran Hotel del Sella donde estuvimos alojados.  
A la hora de comer nos decantamos por degustar un arroz con bogavante, plato estrella en el restaurante de nuestro hotel, coincidiendo con la celebración de la jornada de tan preciado crustáceo. Fue todo un acierto porque estaba delicioso. 

¿Verdad que tiene buena pinta? 

Rico, rico el arroz con bogavante

¡ Ah, y unos chipirones de aperitivo!

Tras el merecido “homenaje gastronómico”, rematado con una reconfortante siesta, nos dirigimos a la Plaza Nueva, lugar de encuentro de los participantes en el IV Desafío Subida a los Lagos de Covadonga. Nuestros amigos del Vespa Club de Asturias, anfitriones del evento scooterista, estaban con todo preparado para el recibimiento y posterior inscripción de los concurrentes en el tan esperado acontecimiento vespero. Durante toda la tarde tuvimos la oportunidad de saludar a los compañeros asturianos y a un nutrido grupo de amigos venidos desde distintos puntos de España. En un ambiente festivo y de buen rollo intercambiamos experiencias y anécdotas hasta la hora de la cena- picoteo, que tuvo lugar en el Restaurante El Ancla.

Un momento de la inscripción

Mayor, conversando con un joven compañero

El amigo Mayor no pierde ocasión de contar sus aventuras a lomos de su Rayo Celeste

Vespas en la Plaza Nueva

Una de las lambretas participantes

Curioseando el sidecar de Pepe

 La noche la pasamos muy divertida y los que tenían más ganas de marcha disfrutaron de lo lindo en el puerto, bailando al son de un grupo musical dispuesto para amenizar las fiestas de la villa riosellana. Al día siguiente, sábado 5 de julio, estaba prevista la salida hacia Arriondas- Cangas de Onís donde más de un centenar de scooteristas volverían a ver cumplido el reto de ascender a los lagos; desafío del que por segunda vez fuimos partícipes.

Qué bien se lo pasaron estas jóvenes vesperas

Robert , un  artista escanciando la sidra

Qué suerte haber conocido a Mayor, el más veterano del encuentro